La mejor forma de aprender francés es la misma con la que aprendiste español, conversando. Si te encuentras en el proceso de aprender un nuevo idioma, déjanos decirte: ¡Excelente!, estás más cerca de crecer profesional y personalmente, así como de ampliar tu conocimiento del entorno y del mundo en sí.
Si eres de los que conserva algún mal recuerdo de las clases de idiomas en el pasado, seguramente es a consecuencia de una mala metodología de enseñanza. Está comprobado que la mejor manera de aprender un idioma es mediante la practica constante del mismo, en situaciones reales que te permitan desarrollar habilidades para enfrentarte a cualquier entorno de la vida cotidiana.
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Las clases con dictado han quedado en el pasado
Memorizar listas de palabras o conjugaciones verbales y los exámenes tediosos, son métodos poco eficientes para la enseñanza de la gramática francesa. Si lo que realmente se desea es comprender el francés por completo, es necesario salir de la zona de confort y comenzar a hablar y practicar constantemente.
Es primordial hacer contacto con el idioma que se estudia, de manera que se ejercite la pronunciación y se acostumbre al oído a detectar las formas gramaticales correctas.
En este tipo de metodología, el maestro será mucho más que quien haga el “dictado”, pues en su lugar, dirigirá el diálogo con frescura y energía, alentando los debates y los intercambios de ideas que generen conocimiento. Además, los estudiantes lograrán superar el miedo y se expresarán de forma libre, fomentando su seguridad y autonomía al momento de utilizar la gramática francesa.
Lo que si se debe de hacer para aprender:
- Conversar para aprender a pronunciar de manera correcta.
- Escuchar atentamente para detectar errores.
- Conocer el origen de las expresiones, así como la mejor manera de usarlas.
- Practicar el idioma en cualquier oportunidad que se tenga.
Lo que no garantiza un buen aprendizaje:
- Memorizar listas de palabras sin conocer su uso.
- Tomar dictados sin razonar cómo usar el vocabulario en una conversación.
- Repetir frases sin conocer el significado ni la utilidad de las mismas.
- Leer textos largos que no comprendas.
Aprender a utilizar la gramática de forma correcta, dará una buena imagen y evitará que se cometan errores que después puedan convertirse en malos entendidos. Además, nos ofrecerá una mejor comprensión de lo que se comunica y nos ayudará a emitir mensajes claros y concisos de lo que solicitamos; mejorando nuestro desempeño y ahorrándonos tiempo en aclaraciones innecesarias.
